Cambiar Ánodo de Magnesio - Steigleder

En Uruguay, los calefones Steigleder son conocidos por su durabilidad, pero el agua con alta concentración de sales puede acelerar la corrosión interna. El ánodo de magnesio es un componente clave para proteger el tanque del calefón, sacrificándose en lugar del acero. Si el agua de tu zona es dura, o si notás óxido en el agua caliente, es hora de revisar y probablemente cambiar el ánodo. Esta reparación preventiva alarga la vida útil de tu calefón y te evita tener que reemplazarlo por completo.

Tiempo: 15-25 min Dificultad: Fácil Costo: Moderado

Herramientas y Materiales

  • Llave inglesa o llave de tubo (tamaño adecuado al ánodo)
  • Pinza de punta o alicate (opcional, para ayudar a remover el ánodo viejo)
  • Recipiente para recolectar agua
  • Ánodo de magnesio nuevo (repuesto original Steigleder recomendado)
  • Cinta de teflón (para sellar la rosca del nuevo ánodo)
  • Equipo de seguridad: Guantes de goma y gafas de protección

Medidas de Seguridad

Procedimiento Paso a Paso

1Preparación del Calefón

Después de asegurarte de que la corriente está cortada y el agua fría, prepará el área de trabajo. Colocá el recipiente debajo del calefón, cerca de la zona donde se encuentra el ánodo (generalmente en la parte superior o lateral). Algunos modelos Steigleder tienen una tapa plástica que cubre el acceso al ánodo. Retirala con cuidado.

Consejo: Si tenés un modelo Steigleder con resistencia blindada, es buena idea revisar el estado de la misma al mismo tiempo. Si está muy calcificada, podés aprovechar para limpiarla o reemplazarla.

2Aflojar el Ánodo Viejo

Con la llave inglesa o de tubo, aflojá el ánodo viejo. Es probable que esté un poco duro, especialmente si hace mucho que no se cambia. Aplicá fuerza constante y controlada. Si está muy agarrado, podés usar un poco de WD-40 o similar para ayudar a aflojarlo. Dejá que actúe unos minutos antes de volver a intentar.

3Retirar el Ánodo Viejo

Una vez que lo hayas aflojado, terminá de desenroscar el ánodo a mano. Es probable que salga un poco de agua al retirarlo, por eso es importante tener el recipiente preparado. Observá el estado del ánodo viejo. Si está muy corroído o casi desaparecido, confirmás que era necesario el cambio. Si todavía tiene bastante material, es posible que el agua de tu zona no sea tan agresiva, pero igual es recomendable cambiarlo cada dos años.

4Preparar el Ánodo Nuevo

Tomá el ánodo nuevo y enrollá cinta de teflón alrededor de la rosca, en el sentido de las agujas del reloj. Esto ayudará a sellar la conexión y evitar fugas. No escatimes en la cinta, dale unas 5 o 6 vueltas.